Este martes familiares y amigos despidieron a Nelly Herrera, una activista y luchadora social que impulsó la participación ciudadana en temporadas electorales y fundadora de la asociación civil “Alianza Cívica”.
Sus familiares optaron por respetar su duelo por lo que no brindaron declaraciones respecto a su muerte; posterior a los servicios funerarios, su cuerpo fue incinerado obedeciendo a su última voluntad.
Por su parte, la activista feminista Ariadne Lemont mencionó que deja un gran legado y actualmente en estos tiempos de incertidumbre se necesitan de más “Nellys” para defender los derechos de la sociedad.
Desde su juventud comenzó a participar activamente en la huelga Cinsa-Cifunsa, posteriormente fue partícipe de otros movimientos sindicalistas, además de ser una pionera en sentar las bases para la democratización de los procesos y la exigencia de generar transparencia.
